miércoles, 8 de septiembre de 2010

CCCXCI. Miller.

BIFF: Se marchó. Sólo le vi un momento. ¡Me puse tan furioso qe hubiera echado abajo las paredes! ¿De dónde saqué la idea de que yo había trabajado ahí como viajante? ¡Incluso yo mismo me lo creía! Entonces él me echó un vistaso... ¡Y me di cuenta de lo ridícula que ha sido toda mi vida! Hemos estado hablando en sueños durante quince años. Trabajé en el departamento de envíos, nada más.
HAPPY: ¿Y qué hiciste entonces?
BIFF (Con gran tensión y extrañesa): Oliver se marchó, como te digo, y entonces salió su secretaria y me quedé solo en la recepción. No sé qué me ocurrió, Hap, la cuestión es que entré en su despacho... las paredes forradas de madera, un lujo. No sé cómo explicarlo, Hap..., le cogí la estilográfica.
HAPPY: ¡Ostras! ¿Y te sorprendieron?
BIFF: Eché a corrar. Bajé corriendo los once pisos, y una vez en la calle seguí corriendo.

Arthur Miller - Muerte de un Viajante.