jueves, 21 de mayo de 2009

CLV. Levrero.

Sucede que ves las cosas desde tu punto de vista, y cuando crees que algo es de una manera determinad no puedes admitir que, en la realidad, pueda ser de otro modo. - Volvió a adoptar esa expresión de profunda sinceridad, mirándome a los ojos-. Ves, por ejemplo, ese árbol y estás convencido de que el viento trajo una semilla y allí creció, y que el año pasado estaba allí, y el anterior, y que siempre estuvo allí ese árbol. No se te puede ocurrir que, por ejemplo, pueda alguien haberlo trasplantado, porque no te parece lógico que alguien se tome el trabajo de trasplantar un árbol común, como hay tantos, hasta este sitio, donde en apariencia, no cumple ninguna función, donde nadie repararía en él, ni podría distinguirlo de los otros árboles que crecen en gran cantidad cerca de la carretera. Pero, sin embargo, alguna función cumple el árbol ya ves que me ha servido para explicarte cómo puedes estar equivocado en tu manera de pensar. Este hecho, ¿no justificaría que alguien (yo misma, por ejemplo, de haber tenido oportunidad) se tomara el trabajo de trasplantarlo a ese lugar? ¿Y cómo puedes saber si he tenido o no oportunidad de hacerlo?

Mario Levrero - La ciudad.

6 comentarios:

g. dijo...

Día impar.
Hoy 21.
Entrada 11 del mes.
Dos 11 son 22.
Mañana, par.
22 y mitad.

Esto lo pensé hoy, y creo que tal vez son puntos de vista. Cambiantes.

El ciclo uruguayo de mi vida. Otro, tal vez. Onetti, Levrero (supuestamente por tres) y otra vez Onetti. Tal vez todo.

No tengo muchas ganas de nada más que esto. Estuve pensando en cosas malas desde el punto de vista narrativo y cosas por ejemplo, qué sé yo.

Tonteras, estupideces.
Pero bueno.
Por ahora Levrero viene bien, por ahora me gusta. Es una prosa simple, sencilla, directa. Es muy interesante volver a notar que un personaje ande por un mundo que no entiende. Esa idea que todo nos es extraño aun siendo tan igual a lo que nosotros vemos. Visto desde este punto de vista cualquier población, cualquier cuidad, cualquier casa o cualquier estación de servicio puede resultar terrorifica.

Me voy.

Floretta dijo...

simple.

hoy necesitaba simple.

un saludo

Terapia de piso dijo...

La arrogancia de creer que podemos descifrarlo todo.

José Roberto Coppola

Eric dijo...

Nos asimos a nuestras propias realidades como método de supervivencia.

Saludos

Anónimo dijo...

Me gusta ese juego con los números, buscarle la relación.
No conocía a Levrero pero que gustó el fragmento.

Saluditos

Eclipse dijo...

me gusta el cuestionamiento de lo obvio, la búsqueda de las verdaderas razones.
a veces me pongo a divagar conmigo misma al respecto, los orígenes de lo que damos por obvio y perpetuo.
curioso.
guiñada a tu ciclo uruguayo, me da gracia que me lo recuerdes.
besos muchos
muchos (como para atenuar mis deudas)