Cuando ella abre los ojos las horas despiertan respiran como matas de hierba al amanecer como pájaros en la mañana del día siguiente cuando ella extiende sus brazos la máscara cesa el olvido cesa las orugas reinician su marcha cuando ella vuelve a nadar en el agua dormida la tierra entrega sus llaves sus momentos propicios su amapola su maíz una lluvia de azufre una bandera en llamas cuando ella mira a lo lejos se disuelven las sombras y el nacimiento llega
Carbonero.
-
Negro de cabeza a la cintura
El jean lleno de carbonilla
Se acerca al semi lleno de bultos
Apilados uno encima del otro
En una sucesión fínita de carbón.
Su ...